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Prostatitis crónica

Algunas veces el dolor hace que hagamos malabares para mejorarlo, siendo uno de los dolores más molestos en el varón el dolor pélvico crónico. Líneas abajo el Dr. Fernando nos explica al respecto.

El síndrome de dolor pélvico crónico en el varón
La “prostatitis crónica” constituye un cuadro sindrómico y agrupa varias enfermedades y puede estar relacionada con la infección y la inflamación de la próstata (prostatitis bacteriana), el síndrome de dolor pélvico crónico inflamatorio y no inflamatorio y el dolor pélvico no relacionado con la prostatitis.

El diagnóstico clínico de la Prostatitis Bacteriana Aguda (PCA)se basa en un cuadro febril y molestias urinarias marcadas con dificultad para orinar e incluso retención urinaria; la sospecha clínica se confirma con un cultivo de orina.

En el caso de la Prostatitis Crónica Bacteriana (PCB), lo más común es la presentación con Infecciones del Tracto Urinario Inferior recurrentes y por el mismo patógeno siendo frecuente el dolor pélvico y los Síntomas del Tracto Urinario Inferior. En este caso, el diagnóstico se fundamenta el la Prueba de Stamey.

Esta misma prueba se utiliza para discernir entre un Síndrome doloroso Pélvico Crónico (SDPC) Inflamatorio o No inflamatorio; en este caso es más frecuente el dolor pélvico, las molestias perianales, compromiso del aparato digestivo y síntomas del tracto urinario y además puede haber molestias con la eyaculación e incluso disfunción eréctil. En este grupo de pacientes es útil el cuestionario de la NIH – CPSI para valoración de síntomas y su afectación clínica. Una última entidad es la Prostatitis Asintomática.

¿QUE SUCEDE?
La fisiopatología de la Prostatitis Crónica y el Síndrome Doloroso Pélvico Crónico es compleja. A día de hoy se acepta, que, en algún momento en la biografía de los individuos, debe haber existido alguna noxa, que origino cambios locales, con una respuesta a este estímulo nocivo acorde, pero que, tras perpetuarse en el tiempo, consiguen cambios en las vías viscero viscerales, viscero somáticas e incluso afectación directa del sistema nervioso, produciendo dolor neuropático; que a su vez puede contribuir a cambios en la musculatura del suelo pélvico. Lo dramático de estos cambios, es que la sintomatología puede mantenerse en el tiempo, aún habiéndose comprobado la ausencia de la noxa de origen.

LA INYECCIÓN INTRAPROSTÁTICA DE ANTIBIÓTICOS, ¿QUE ROL TIENE?
La cuestión más importante es determinar que pacientes son subsidiarios a este tratamiento.
En la práctica, cuando nos enfrentamos a un paciente con “Prostatitis”, en la mayoría de los casos, son pacientes con un padecimiento crónico, con una afección incluso de años de evolución, y que por ende, dicho cuadro ejerce una afección física y psíquica importantes. Lo real para el grueso de pacientes, es que el diagnóstico no es preciso, o simplemente es errado. De manera que la primera conducta frente a estos individuos, es una valoración integral,mediante historia clínica rigurosa y una exploración que incluya el tacto digital rectal y la valoración de puntos dolorosos,siendo indispensable como hemos comentado previamente la Prueba de 4 vasos de Stamey (con o sin estudio del semen) para dirigir correctamente el tratamiento.

Una vez demostrada la presencia de una PCB, la Inyección Intraprostática de Antibióticos (IIPA) es una alternativa terapéutica plausible, una vez que se ha agotado el tratamiento médico convencional, que incluye, antibiótico en largo periodo de tiempo, alfa bloqueantes, antidepresivos, anti inflamatorios, y neuropáticos, entre otros.

La IIPA es un procedimiento endourológico mínimamente invasivo, con altas tasas de “erradicación” de gérmenes y que puede y debe ser demostrada objetivamente mediante una nueva Prueba de Stamey. Como antecede a este párrafo, la sola “erradicación” de gérmenes de la próstata, no garantiza la mejoría de los síntomas, pero si erradica el foco infeccioso precipitante.

Es importante recalcar que, a pesar de la confirmación de una PCB mediante la prueba de Stamey, no todos los pacientes son subsidiarios a recibir este tratamiento. Por un lado, pueden existir contraindicaciones médicas y, por otro lado, pueden existir características propias del paciente que pueden influir en tasas de erradicación menores a las esperadas como son: un gran volumen prostático, obstrucción en la salida de la orina de la vejiga, cistitis, estenosis de uretra, entre otras.

COMENTARIO
El diagnóstico y el tratamiento de pacientes con Prostatitis Crónica / Síndrome Doloroso Pélvico Crónico en la práctica clínica es complejo. Por un lado, es considerada por los especialistas como una patología oscura, con dificultad para llegar a un diagnóstico preciso, fundamentalmente por el uso poco extendido de la prueba de Stamey, y por otro, el fracaso terapéutico al que se ven abocados los tratamientos sin un diagnóstico correcto.

La valoración de pacientes con PC / SDCP debe ser realizada en centros especializados en esta patología y su manejo en todos los casos debería ser multidisciplinar, involucrando Urólogos, Digestivos, Neurólogos, Rehabilitadores y psicoterapeutas.

Autor: Fernando Susaníbar

Dr. Luis Susaníbar Napurí
Especialista en Urología y Medicina Sexual
Contactos:
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Consultas: 511 3324009  /  Móvil:  511 989662887
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www.urologiperuana.com

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